Aldo Giraudo – , Don Pablo Albera maestro de vida espiritual

En Pablo Albera tenemos un hombre formado, personalmente, por Don Bosco, y uno de los hijos que más contribuyó a la transmisión y propagación de su espíritu y misión. El libro Don Pablo Albera, maestro de vida espiritual, nos ofrece un retrato muy expresivo de la personalidad y de la formidable contribución que, el segundo sucesor de Don Bosco, ofreció para el desarrollo del carisma salesiano. Podríamos decir que don Albera, de alguna manera, ha permanecido en la sombra hasta hoy; gracias al año que se le dedica en el centenario de su muerte, ahora está volviendo a plena luz, como una figura fascinante y atractiva.

Este Salesiano de los primeros tiempos –el más joven de los que firmaron la lista de primeros socios Salesianos, en junio de 1860, y entre los pioneros en Mirabello, bajo la dirección de joven Don Rua– manifiesta no solo un marcado espíritu de iniciativa y una capacidad envidiable para ganar corazones, como fundador de la obra salesiana en Génova, y en Francia, sino también una sorprendente tenacidad de carácter, que se revela, por ejemplo, en el larguísimo viaje de tres años en América, donde visitó todas las presencias salesianas como representante de Don Rua.

Pero quizás, el ámbito en el que Albera se revela más es el de Director espiritual de la naciente Congregación. De la pluma de Giraudo emerge un hombre que se ocupó, especialmente, de los Salesianos en formación, a través de las visitas a las casas de formación, la preparación de formadores, la vigilancia de la aplicación de las Constituciones, de los Reglamentos y de las deliberaciones capitulares en materia de formación y de estudios. Es particularmente impresionante su hábito de leer, meditar, tomar notas y hacer suyos los muchos escritos de espiritualidad sobre los que reflexionaba. De esta intensa y constante dedicación vinieron los frutos en el servicio que brindó como guía espiritual y en los innumerables ejercicios espirituales que predicaba.

Como Rector Mayor, don Albera siguió dando un gran valor a la vida de oración y de estudio como fuente de fecundidad apostólica. Eran temas en los que insistía mucho. Apelaba constantemente a Don Bosco, aquel Don Bosco, que lo había guiado, desde niño, a un verdadero seguimiento del Señor: «¡Todo y solo para Jesús!». El amor por el estudio lo ha abierto a apreciar, de una nueva manera, lo que Francisco de Sales había sido para Don Bosco. Esto es lo que se desprende, especialmente en la segunda parte del libro de Giraudo, que hace percibir el fuego ardiente bajo una experiencia de vida sumamente intensa y plena, y también se puede captar, de igual modo, en la antología de los escritos de Pablo Albera, en la tercera parte de este libro.

 

 

 

SUMARIO

 

Primera parte – LA VIDA (1845-1921)

Capítulo 1: LOS AÑOS DE LA FORMACIÓN (1845-1868)

Capítulo 2: PREFECTO EN VALDOCCO Y DIRECTOR EN GÉNOVA (1868-1881)

Capítulo 3: ISPECTOR DE LAS CASAS SALESIANAS DE FRANCIA (1881-1892)

Capítulo 4: DIRECTOR ESPIRITUAL DE LA CONGREGACIÓN SALESIANA

Capítulo 5: LA VISITA A LAS CASAS SALESIANAS DE AMÉRICA (1900-1903)

Capítulo 6: COLABORADOR DE DON RUA DESDE 1903 A 1910

Capítulo 7: LOS PRIMEROS AÑOS DE RECTORADO (1910-1913)

Capítulo 8: EL DRAMA DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL (1914-1918)

Capítulo 9: EL SERENO CREPÚSCULO (1919-1921)

 

Segunda parte – LA CONTRIBUCIÓN A LA ESPIRITUALIDAD SALESIANA

  1. El magisterio de la vida
  2. Espíritu de oración
  3. Vida de fe
  4. Don Bosco modelo del salesiano
  5. Las virtudes del salesiano

 

Tercera parte – DE LAS CARTAS CIRCULARES DE DON PABLO ALBERA

  1. El espíritu de oración
  2. En la escuela de Don Bosco
  3. Vivir de fe
  4. El oratorio es el alma de nuestra Pía Sociedad
  5. ¡Sed todos misioneros!
  6. la Virgen y Don Bosco
  7. La dulzura del salesiano
  8. Hacer revivir a Don Bosco en nosotros
  9. Ser dignos de nuestro padre Don Bosco
  10. Don Bosco nuestro modelo
  11. Lancémonos a los brazos de Dios
  12. Como nos quería Don Bosco
  13. La ciencia necesaria para salesiano sacerdote
  14. El perfeccionamiento de la propia vida espiritual
  15. Vocaciones y espíritu salesiano
  16. Sembradores de vocaciones

 

Periodo de referencia: 1845 – 1921

Aldo Giraudo, Don Pablo Albera maestro de vida espiritual. Traducción José Antonio Hernández y colaboradores, Roma, Settore Formazione Società di San Giovanni Bosco 2021.

Institución de referencia:
Centro Studi Don Bosco
Centro Studi Don Bosco

Comments are closed.

Proudly powered by WordPress | Theme: Baskerville 2 by Anders Noren.

Up ↑