Índice:
- TÚ ERES MI LUZ…
- Volver al proprio corazón.
- Sinceros con Dios y con nosotros mismos.
- Capaces de escucha.
- Gustar el silencio.
-
- Descubrir las proias resistencias.
- Acceder con confianza al Padre.
- Hacer un camino de oración.
- Dar la palabra a Dios.
- Acoger la mirada de Dios en la profundidad del proprio ser.
- La experiencia de algunos amigos a Dios.
- LA ORACIÓN DEL SALESIANO.
- La semilla: Mamá Margarita.
- Don Bosco, hombre de oración.
- Siguiendo a san Francisco de Sales.
- El marchamo oratoriano.
- Contemplativo en la acción.
- Algunas condiciones: La orientación interior.
- La intención.
- Sentirse instrumentos de Dios en favor de los jóvenes.
- Descubrir la presencia del Espíritu en la vida de los jóvenes.
- CONCLUSIÓN. La oración de nuestros santos.
- La liturgia de la vida.
- Iniciación de los jóvenes en la oración.
- María, icono de nuestra oración.
Periodo de referencia: 2001
J. E. Vecchi, «Cuando recéis decid: Padre Nuestro…» (Mt 6,9) El salesiano, hombre y maestro de oración para los jóvenes, in «Actas del Consejo General» 81 (2001) 374, 3-55.
Institución de referencia:
Direzione Generale SDB